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TICKLING 5.- PRECIOSIDADES ESPAÑOLAS

Ricky666

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Dec 29, 2006
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Capitulo 5.- Preciosidades españolas

Hola amigos,

Para este quinto capitulo, me he decidido por algunas de las mas hermosas mujeres que hay en España.

Saludos amantes de las cosquillas!!!!!

TICKLING


Capitulo 5.- Preciosidades españolas


Susan se despertó con el cuerpo dolorido, había dormido casi doce horas seguidas, los últimos dos días los había pasado cosquilleando sin parar junto a su amiga del alma Irina y no había dormido casi nada, estaba en la habitación amarilla de la cuarta planta de la mansión de Irina, se levanto y después de pasar por el lavabo bajo al salón de la primera planta, se encontró con Ana, que estaba sentada en un sofá delante de una de las enormes pantallas repartidas por toda la estancia con el mando de la tele en la mano y cambiando de canal continuamente, “¿buenos días Ana, ¿dónde esta Irina?”, Ana se puso en pie rápidamente, “buenos días señorita Jackson, la señorita Dragov se marcho hace un par de horas, estaba tumbada en este mismo sofá mirando la tele cuando vio algo que le llamo muchísimo la atención, cuando me llamo, yo estaba en la cocina preparándome algo para desayunar y me dijo que estaría fuera unas horas y que se llevaría a cuatro guardias con ella, le pregunte que a donde iba con tanta prisa pero no me lo quiso decir, me dijo que era una sorpresa para usted y no se fiaba de me fuese de la lengua, ya había cambiado el canal de la televisión a si que no se que o a quien ha visto, por lo poco que escuche desde la cocina, parecía un programa de entrevistas, pero no tengo ni idea de que canal era”, Susan le cogió el mando a Ana y se sentó en el sofá, a continuación comenzó a repasar todos los canales, había demasiados, cuando llego al trescientos lo dejo correr, “es imposible, además con el rato que hace seguro que estarán dando otra cosa, ¿qué canal seria?, ¿a quien habrá visto?”, Susan estaba muy intrigada y al mismo tiempo excitada al no saber que estaba tramando su amiga Irina, Ana se dirigió a ella, “señorita Jackson, si quiere distraerse puedo hacer que le traigan a Erika Durance, su mente esta totalmente anulada pero su reacción a las cosquillas sigue siendo muy atractiva, me he pasado casi toda la noche entretenida con ella, he ordenado a dos guardias que la metan en una furgoneta para sacarla de aquí, ya me he vengado de ella por la patada que me dio, pero si quiere puede jugar con ella hasta que regrese la señorita Dragov”, Susan respondió a Ana con una sonrisa maliciosa, “buena idea Ana, tráemela me vendrán bien un par de apetitoso pies mientras veo la tele”, Ana salió de la mansión y regreso al cabo de cinco minutos con un enorme saco a la espalda, lo dejo en el suelo delante del sofá donde estaba Susan, “gracias Ana, puedes traerme una cuerda larga?”, “claro señorita, enseguida”, Ana volvió a salir por la puerta principal y regreso con la cuerda entregándosela a Susan, que había sacado las piernas de Erika Durance del saco, cogió la cuerda y rodeo todo el saco atándolo con fuerza, todo el cuerpo de Erika estaba dentro del saco excepto los pies, entonces Susan y Ana cogieron a Erika y la estiraron sobre el sofá, “gracias Ana, cuando regrese Irina ya podéis venir a recoger a esta guarra”, “si señorita, voy a organizar los turnos de vigilancia de esta noche, hasta luego”, Ana salió por la puerta principal y Susan se tumbo en el sofá sobre el cuerpo de Erika pero en sentido contrario, por lo que tenia los pies de la pobre Erika Durance a escasos centímetros de su boca, Erika estaba dentro del saco totalmente inconsciente a causa del somnífero que le habían administrado las guardias, Susan cambio de canal hasta que encontró un programa de lucha libre femenina y se entretuvo mirándolo mientras saboreaba los dedos de los pies de Erika Durance uno a uno dentro de su boca, chupandolos como si fueran caramelos.
Al cabo de dos horas Susan se levanto del sofá aburrida, había estado todo el tiempo saboreando los pies de Erika Durance, que permanecía inconsciente, le resultaban muy sabrosos, pero lo que ha ella mas le gustaba era ver las reacciones de sus victimas y el estado de Erika lo hacia totalmente imposible, salió al jardín en busca de Ana, la encontró charlando con dos guardias, “hola Ana, ya os podéis llevar a esa perra, he terminado con ella, por cierto, ¿sabes algo de Irina?”, Ana ordeno a las dos guardias que estaban con ella que fueran a buscar a Erika Durance y la metieran en la furgoneta, “si, la señorita Dragov acaba de llamar y me ha dicho que estará aquí en una hora, pero no me ha dicho nada de que es lo que trae, me ha dicho que prepare tres habitaciones así que por lo menos sabemos que trae tres invitadas”, Susan sonrió muy excitada, “me encanta!, además tres es un buen numero, la verdad es que cuatro fue demasiado, voy a cambiarme y volveré aquí a esperar a Irina, estoy impaciente por ver que trae!, ja, ja, ja”, Susan entro en la mansión y fue a la habitación donde tenia sus cosas, se dio una ducha rápida, se vistió con una camiseta sin mangas de color azul, unos pantalones vaqueros cortados por debajo de las rodillas y unas sandalias marrones que únicamente cubrían el empeine de sus pies, dejando los dedos y los talones al descubierto, aliso su hermosa melena rubia y cuando bajaba las escaleras que la llevaban a la primera planta escucho un claxon, Irina acababa de llegar.
La limusina se detuvo al pie de las escaleras que conducían a la entrada principal de la mansión, se abrieron las puertas traseras y salieron dos guardias, a continuación salieron tres mujeres con las manos esposadas a la espalda, amordazadas y con una venda en los ojos, Susan se excito enormemente al observar sus pies, en especial los de la mujer mas alta, las tres cautivas calzaban sandalias veraniegas que mostraban prácticamente la totalidad de sus pies, Irina salió tras las secuestradas, “hola Susan, ¿que te parecen tus regalos?, ¿quieres empezar ya o esperamos un poco?”, Susan observaba, relamiéndose, los pies de las tres mujeres mientras entraban en la mansión custodiadas por dos guardias cada una, “mmmm, se ven tan apetitosos, sobre todo los de la morena, son perfectos, me gustaría empezar con ella”, Irina agarro a Susan por el brazo y las dos amigas comenzaron a subir las escaleras para entrar en la mansión, “Bueno Susan, tu decides, empezaremos con la morena, realmente sus pies son increíbles, creo que son los mas perfectos que he visto en mi vida, esperemos cinco minutos y ya podremos subir a la habitación rosa de la cuarta planta, ahí estará tu primera elección, he hecho instalar pantallas y cámaras en las tres habitaciones donde nos esperan esas perras, me encanto la idea que tuviste de que vieran lo que les hacemos a las otras mientras esperan su turno”, las dos amigas estuvieron diez minutos charlando animadamente sentadas en un sofá, después se dirigieron a la cuarta planta, buscaron la puerta rosa y entraron en la habitación, la mujer que estaba atada a la cama con su cuerpo en forma de “X”, sujeta por cuatro correas de cuero alrededor de sus muñecas y sus tobillos, la única ropa que le habían dejado puesta las guardias era la ropa interior, el sujetador y una diminutas braguitas de color blanco, tenia un cuerpo espectacular, Susan estaba alucinando con los pies, Irina le quito la venda de los ojos, “bueno Susan ¿la conoces?, Susan miro la cara de la mujer, “la verdad es que no, ¿quién es?”, Irina sonrió a su amiga, “es una presentadora de televisión española, se llama Silvia Jato, esta mañana estaba viendo la tele y me detuve en un canal de España, era de entrevistas y cuando iba a cambiar hicieron un primer plano de sus pies para mostrar sus zapatos, me quede hipnotizada al ver estos pies tan hermosos, así que me fui a por ella, y de paso me he traído a dos de las invitadas que tenia previsto entrevistar, espero que te gusten”, Susan sonrió a Irina mientras se arrodillaba a los pies de la cama delante de la planta del pie derecho de Silvia Jato, “¿bromeas Irina?, podría pasarme semanas disfrutando de estos pies, son espectaculares!”, Irina conecto la pantalla de la habitación y las cámaras para que las otras dos secuestradas pudieran ver y escuchar todo lo que iba a pasar en esa habitación, a continuación le quito la mordaza a Silvia Jato, “Hola desgraciada, ya veras que bien lo vamos a pasar”, Silvia Jato miro a Irina a los ojos con una expresión de suficiencia intentando hacerse la dura y les hablo con voz severa, “¿sabéis lo que estáis haciendo niñatas?, esto es un secuestro y se os va a caer el pelo cuando la policía se entere, ¿qué tenéis veinticuatro años?, yo tengo treinta y cuatro así que sé lo que me digo, si nos soltáis a mí y a las otras dos mujeres que habéis secuestrado ahora mismo, quizás no diga nada, vamos, soltadme ahora mismo!!!”, Susan estaba respirando el aroma del pie derecho de Silvia Jato, recorriendo la planta de arriba abajo con su nariz a un centímetro de distancia, Silvia se dio cuenta y se dirigió a ella con el mismo tono amenazante, “¿qué estas haciendo niñata?, soltadme ahora mismo, me estoy empezando a enfadar!!”, Irina y Susan se miraron sonriendo, entonces Irina salto sobre Silvia Jato y se sentó sobre su estomago, “veo que tienes mucho genio, creo que te conviene relajarte un poco, y qué mejor que reírse un poco, ¿no te parece?”, entonces Irina clavo sus dedos en las dos axilas de Silvia Jato y comenzó a cosquillearlas con sus dedos, aplicando una mano en cada axila, al mismo tiempo, Susan, comenzó a rascar con todos los dedos de sus dos manos la planta del pie derecho de Silvia mientras hundía su nariz entre los dedos para respirar todo el aroma que desprendían, Silvia comenzó a gritar y reír, no soportaba las cosquillas, “ja, ja, ja, ¿qué hacéis?, ja, ja, soltadme!, ja, ja, esto es un delito muy serio!, ja, ja, ja, basta!!, ja, ja, ja!”, Irina se dirigió a ella sin dejar de cosquillear a fondo sus axilas, “¿aun sigues dando ordenes puerca?, ¿no ves que lo único que haces es empeorar tu situación?, eres patética, ríe para nosotras desgraciada!!”, Irina acelero el ritmo de sus manos que no dejaban de trabajar las axilas de Silvia, Susan envolvió con sus labios el dedo gordo del pie derecho de Silvia y comenzó a chuparlo a conciencia manteniéndolo dentro de la boca mientras seguía cosquilleando con sus dos manos la planta y en talón, rascando a gran velocidad con sus hábiles dedos, Silvia Jato estaba histérica, “ja, ja, jaaaaagggg!!!, ja, ja, ja, bastaaaa!!!, ja, ja, ja, noooo!!!, ja, ja, ja”, Irina seguía increpándola sin concederle ni un segundo de descanso a sus axilas, “ya no eres tan chula, ¿verdad zorra?, venga dime niñata otra vez desgraciada!”, a Irina le había molestado mucho que Silvia las llamara niñatas, pese a su juventud siempre había sido muy madura, quería machacar a Silvia Jato por eso, Susan estaba saboreando todos los dedos del pie derecho de Silvia dentro de su boca, deslizando su lengua entre ellos mientras cosquilleaba la planta y el talón con las manos, “¿has visto Irina?, la muy perra nos quería intimidar con su discurso de mujer adulta, me encanta trabajar con maduritas, ja, ja, ja, démosle su merecido!”, entonces Susan se fue a por el pie izquierdo de Silvia Jato, comenzó a deslizar dos plumas al mismo tiempo entre los dedos mientras deslizaba su lengua por toda la planta varias veces, después comenzó a chupar el talón rodeándolo con sus labios sin dejas de cosquillear entre los dedos con las dos plumas, Irina hundió la cara en la axila derecha de Silvia y comenzó a lamerla y mordisquearla mientras le cosquilleaba la axila izquierda con su mano derecha y el costado derecho con su mano izquierda, después de tres horas de cosquillas y lametones, Silvia comenzaba a estar agotada, “uuff!, ja, ja, ja, basta!, ja, ja, ja, no puedo ... ja, ja, maaaasss!!, ja ja, ja”, Irina y Susan estaban muy concentradas cosquilleando a Silvia Jato, no le daban ni un segundo de tregua, querían que sufriera al máximo, Irina hundió su cara en la axila izquierda de Silvia y comenzó a lamerla mientras le cosquilleaba los costados aplicando una mano en cada uno, Susan deslizaba dos plumas por las plantas de los pies de Silvia, aplicando una pluma en cada planta mientras mordisqueaba y chupaba los dedos del pie izquierdo manteniéndolos dentro de la boca, pasaron dos horas mas y Silvia estaba a punto de desmayarse, “espera Susan, démosle un par de minutos, la muy perra esta a punto de desmayarse, creo que aun no ha tenido suficiente”, entonces Irina y Susan se tumbaron en la cama a los lados de Silvia Jato y comenzaron a darle lametones por la cara mientras le sujetaban la cabeza con fuerza por el pelo y la mandíbula, “ basta!!, dejadme de una vez!!!, aaagggg!!, dejad de chuparme la cara!!, estáis locas!!, aaaggg!!, entonces Susan comenzó a meterle la lengua dentro de la boca a Silvia cada vez que intentaba hablar, “he dicho que ... mmmfff!!, me dej... mmmfff!!, ...eis!!, mmmff!!, mmmmffff!!, Irina estaba trabando la oreja izquierda de Silvia, metiendole la lengua hasta el tímpano y mordisqueándole el lóbulo, Susan había rodeado los labios de Silvia con los suyos y seguía invadiéndole la boca con su lengua mientras le tapaba la nariz pellizcándosela con dos dedos para dificultarle la respiración, “mmmfff!!, aaarrrgggg!!!, mmmfff!!!”, entonces Susan se deslizo sobre el cuerpo de Silvia sentándose sobre su estomago y comenzó a cosquillearle las dos axilas con las dos manos sin dejar de juguetear con su lengua dentro de la boca de su presa, Irina le arranco el sujetador a Silvia de un tirón y comenzó a chuparle el pecho izquierdo mientras deslizaba una pluma sobre el derecho, “vamos Susan, acabemos con esta puerca!”, Silvia Jato estaba realmente exhausta, la sensación que le producían los dedos y las lenguas de Irina y Susan era terrible, Irina se dirigió de nuevo a los pies de Silvia después de recorrer a conciencia sus pechos con la lengua, se centro en el izquierdo, rodeo los cinco dedos con sus labios y comenzó a chuparlos dentro de su boca mientras cosquilleaba la planta con todos los dedos de sus dos manos, Susan estaba lamiendo y mordisqueando el cuello de Silvia mientras le cosquilleaba las dos axilas al mismo tiempo con sus dos manos, “aaaggghhh!!!, basta!!, ja, ja, ja, no ... ja, ja, ja, puedo .... aagghh!, maaaasss!!, ja, ja, nooooo!!”, y así pasaron dos horas mas, entonces Silvia Jato se desmaya totalmente agotada, su cuerpo estaba empapado en sudor y su rostro desencajado estaba cubierto de lagrimas, saliva y sudor, Irina y Susan, que estaban trabajando un pie cada una saboreando los dedos dentro de la boca y cosquilleando las plantas de pusieron en pie observando el aspecto de Silvia Jato con una sonrisa maquiavélica en los labios, “maldita perra, mira que llamarme niñata, así aprenderá!”, Susan miro a su amiga con una sonrisa radiante, “si, la muy desgraciada se pensaba que nos iba a acojonar con su discurso de mujer adulta, ja, ja, ja”, entonces Irina se dirigió a la pantalla que tenia a su espalda girando el cuello para lanzarles un mensaje a las otras dos secuestradas, que habían presenciado todo lo que le habían echo Irina y Susan a Silvia jato a través de las pantallas que tenían en sus habitaciones, “¿habéis visto que bien se lo a pasado esta guarra?, no paraba de reír, ahora vamos a por vosotras, ja, ja, ja”, las otras dos prisioneras recibieron el mensaje aterrorizadas en sus habitaciones, Irina no quiso captar sus imágenes en la pantalla para que Susan no conociese su identidad todavía, entonces las dos torturadoras salieron de la habitación y se detuvieron en medio del pasillo, “Susan, vamos a la habitación violeta, ahí esta la segunda victima”, las dos amigas andaron unos diez metros por el pasillo hasta llegar a la puerta violeta, Irina saco su teléfono móvil del bolsillo y llamo a Ana, “hola Ana, reúne a tres guardias y ya podéis ir a la habitación rosa a acabar con ella, esta vez no voy a llamar a Bianca, confió en vosotras, quiero que la trabajéis a conciencia, cuando acabéis con ella esperad en el salón principal hasta que os vuelva a necesitar, hasta luego”, entonces entraron en la habitación violeta, la mujer que estaba atada a la cama era mas pequeña que Silvia Jato, pero su cuerpo era espectacular, tenia una larga melena rubia, sus pies eran pequeños pero muy hermosos y vestía únicamente una pequeñas bragas rojas, tenia una pelota de goma dentro de la boca sujeta con una correa de cuero por detrás de la cabeza y los ojos vendados con un pañuelo azul, al igual que Silvia Jato, estaba atada con correas haciendo con su cuerpo la forma de una “X”, Irina se dirigió a ella y le quito el pañuelo, descubriendo unos preciosos ojos azules abiertos como platos que recorrían la habitación a gran velocidad, “y esta, Susan, ¿la conoces?”, Susan la miro detenidamente, “si, me suena su cara, hacia una serie en España, ¿cuál era?”, Irina espero unos segundos antes de hablar de nuevo, “ es Patricia Montero, no es muy conocida y realmente es una actriz pésima, si ha salido por la tele ha sido por su físico, ya que sus dotes de interpretación son prácticamente nulos, ja, ja, ja”, Patricia la miro con rabia en los ojos, Susan se dio cuenta y se avalazo sobre ella sentándose sobre su estomago, entonces le sujeto la cabeza con fuerza por las mejillas con las dos manos y le hablo a dos centímetros de la cara, “¿porque que miras así a mi amiga, desgraciada?, lo que ha dicho es verdad, eres una actriz pésima, siempre haciendo el papel de rubia tonta, eres una vergüenza para las mujeres, yo también soy rubia, pero no soy tan inútil como tu, ahora veras perra!”, Susan hundió su cara en la axila izquierda de Patricia y comenzó a mordisquearla y lamerla mientras le cosquilleaba los costados con las dos manos, Irina le quito la pelota de goma de la boca y comenzó a lamerle la cara mientras le sujetaba la cabeza con fuera por los pelos y la mandíbula, Patricia empezó a gritar pidiendo clemencia, “nooo!!, por favor!!, dejadme!!, no volveré a hacer de rubia tonta!!!, ja, ja, ja, mis axilas!!!, nooo!, tengo muchas cosquillas, por favor, tened piedad de mi, piedad!!!, ja, ja, ja”, Susan hundió su cara en la axila derecha de Patricia y comenzó a lamerla y mordisquearla sin dejas de cosquillearle los costados con sus manos, Irina mordisqueo el cuello de Patricia varias veces y después se dirigió a los pies, los pies de Patricia eran pequeños pero se veían muy apetitosos, Irina agarro el tobillo izquierdo de Patricia y se metió el pie en la boca, tenia la mitad del pequeño pie dentro y lo saboreaba a conciencia mientras con su mano derecha lo sujetaba por el tobillo y con los dedos de la mano izquierda cosquilleaba el talón, Patricia estaba sufriendo muchísimo, ya que no soportaba que le tocaran los pies, era una chica terriblemente sensible a las cosquillas y un leve roce en sus pies le hacia soltar escandalosas carcajadas, nunca había permitido que nadie se los tocara y ahora estaban siendo recorridos por las lenguas de dos despiadadas mujeres, Irina seguía trabajando el pie izquierdo de Patricia, manteniendo medio pie dentro de su boca, chupandolo a conciencia y recorriéndolo con su lengua mientras cosquilleaba la otra mitad con sus dedos, Susan ahora estaba trabajando en el pie derecho de Patricia, también tenia dentro de la boca la mitad del pie saboreándolo intensamente mientras cosquilleaba el talón con los habilidosos dedos de sus dos manos, el cuerpo de Patricia se retorcía todo lo que le permitían las correas que la sujetaban a la cama por los tobillos y las muñecas, “aaaggghhh!!!, ja, ja, ja, aaagghhhh!!!, nooo!!!, ja, ja, ja, bastaaaa!!!”, Irina y Susan comenzaron a cosquillear las piernas de Patricia mientras saboreaban sus pequeños pies manteniéndolos dentro de sus hambrientas bocas que los saboreaban a conciencia y deslizaban sus leguas entre los dedos una y otra vez, después de dos horas interminables para la pobre Patricia durante las cuales sus pies estuvieron todo el tiempo dentro de las bocas de Irina y Susan, las dos diabólicas amigas se abalanzaron sobre las axilas de Patricia Montero, Irina hundió su cara en la axila izquierda y comenzó a lamerla y mordisquearla mientras le cosquilleaba el costado izquierdo con su mano derecha y le cosquilleaba el pecho izquierdo con una pluma con la mano izquierda, Susan hundió su cara en la axila derecha de Patricia lamiéndola y mordisqueándola con furia mientras le cosquilleaba el costado derecho con su mano izquierda y cosquilleaba el pecho derecho con una pluma con su mano derecha, Patricia estaba histérica, los pies eran la parte mas sensible de su cuerpo, pero sus axilas también eran enormemente delicadas, “noooo!!, ja, ja, ja, aaagggghhh!!, ja, ja, ja, nooooo!!!, bastaaaa!!!, ja, ja, ja, aaaggghhh!!!”, Irina levanto la cabeza dando unos segundos de descanso a la axila izquierda de Patricia, “mmm, realmente esta perra esta deliciosa, no crees Susan”, Susan levanto la cabeza liberando la axila derecha de Patricia de su terrible lengua, “si, esta realmente exquisita, a comer, ja, ja, ja”, entonces las dos amigas volvieron a hundir sus caras en las terriblemente sensibles axilas de Patricia Montero, deslizando sus lenguas implacablemente sobre ellas mientras le cosquilleaban los costados y los pechos con las manos, pasaron dos horas mas dedicadas exclusivamente a las axilas de Patricia, entonces Irina salto de la cama, cogió el mando de la pantalla y sintonizo la imagen de la habitación rosa para ver como estaban trabajando sus guardias a Silvia Jato, se sentó a los pies de la cama, entre los pies de Patricia montero y comenzó a cosquillear las plantas de los dos pies al mismo tiempo, aplicando una mano en cada pie, mientras miraba la pantalla, Susan se había sentado sobre el estomago de Patricia Montero y estaba cosquilleándole las dos axilas al mismo tiempo aplicando una mano en cada una mientras le recorría una y otra vez sus desencajada y sudada cara con la lengua, Irina seguía cosquilleando las plantas de los pies de Patricia mientras observaba el monitor con atención y una enorme sonrisa.
Las cuatro guardias estaban trabajando los pies y las axilas de Silvia Jato a conciencia con sus lenguas mientras deslizaban ocho plumas por todo su desnudo y retorcido cuerpo, le habían metido en la boca un calcetín sudado de la musculosa y enorme Ana y se la habían sellado con una trozo de cinta aislante para que no pudiera escupirlo, las guardias deslizaban sus lenguas implacables a una gran velocidad y una técnica depurada sobre los pies y las axilas de Silvia Jato, dedicaban mucho tiempo a perfeccionar su técnica y eran realmente buenas, Irina estaba disfrutando enormemente pero quería mas, volvió a sacar su teléfono móvil y llamo a Ana de nuevo, la cual estaba deslizando su enorme legua por toda la axila derecha de Silvia Jato, entonces saco su teléfono del bolsillo y contesto a Irina, “hola señorita Dragov, dígame, ¿que desea?”, “hola Ana, estáis haciendo un trabajo fantástico con esa perra, pero quiero que llames a cuatro guardias mas para que se unan a vosotras, por cierto, tenéis una técnica muy buena, hasta luego”, “gracias señorita, hasta luego”, entonces Ana llamo a Marta, Marta era la segunda guardia mas antigua, después de Ana, y cuando Ana no estaba, era la que asumía el mando, al cabo de cinco minutos, cuatro guardias mas, encabezadas por Marta, entraron en la habitación rosa y comenzaron a aplicar sus lenguas sobre Silvia Jato, una comenzó a lamer el pecho derecho mientras cosquilleaba el izquierdo con una pluma, otra comenzó a lamer el costado derecho a la altura de las costillas mientras cosquilleaba el ombligo introduciendo la punta de una pluma, las otras dos sujetaron la cabeza de Silvia Jato con fuerza por el pelo y comenzaron a recorrerle toda la cara con sus lenguas y a mordisquearle el cuello y las orejas, Silvia Jato estaba al borde de la locura, tenia encima a ocho mujeres cosquilleándola sin piedad, aplicando sobre su torturado cuerpo plumas y lenguas a un ritmo imposible de soportar, especialmente para una mujer tan sensible a las cosquillas, además el sudado calcetín que tenia en la boca le dificultaba enormemente la respiración, Irina se había tumbado en la cama boca abajo al lado derecho de Patricia Montero y observaba el trabajo de sus guardias con Silvia Jato en la pantalla, mientras saboreaba los dedos del pie derecho de Patricia dentro de su boca, deslizando su lengua entre los dedos a la vez que cosquilleaba la planta con todos los dedos de sus dos manos al mismo tiempo, Susan se había sentado sobre la cara de Patricia mirando hacia los pies de la cama para ver en la pantalla como estaban acabando con Silvia Jato, restregaba su culo por el rostro de Patricia mientras le cosquilleaba las dos axilas al mismo tiempo aplicando una mano en cada una, “¿cómo lo llevas rubia tonta?, ¿te gusta sentir mi culo en tu delicada carita de muñeca?, ja, ja, ja”, entonces Susan se quito los pantalones y comenzó a botar sobre la cara de Patricia Montero la cual cogía aire cada vez que el culo de Susan, cubierto únicamente por sus diminutas y sudadas bragas, se despegaba de su cara, Patricia apuraba al máximo antes de cerrar la boca para coger todo el oxigeno posible por lo que la mayoría de las veces, cuando el culo de Susan impactaba sobre su rosto, Patricia tenia la boca abierta y sin quererlo, estaba saboreando el culo de su implacable torturadora, Patricia estaba pasándolo realmente mal.
Mientras en la habitación Rosa, Silvia Jato estaba apunto de perder la razón, dos guardias estaban trabajándole el pie derecho, una mantenía los dedos dentro de la boca y los saboreaba a conciencia mientras deslizaba dos plumas por la planta, la otra estaba saboreando el talón dentro de su boca mientras deslizaba dos plumas mas por la planta, dos guardias mas estaban trabajando en el pie izquierdo, aplicando la misma técnica que sus dos compañeras aplicaban en el pie derecho, saboreando los dedos y el talón dentro de sus bocas y aplicando cuatro plumas en la planta, dos guardias mas trabajaban sobre la axila izquierda, con los rostros hundidos en ella lamiéndola y mordisqueándola sin descanso al mismo tiempo, Marta estaba trabajando la axila derecha, cuando actuaba en grupo, Marta siempre se encargaba de esa zona, las axilas de sus victimas eran su parte preferida, en especial la axila derecha, deslizaba al mismo tiempo su lengua y dos plumas, la combinación era extremadamente dura para sus victimas, Marta se relamía después de cada lametón que aplicaba sobre la axila derecha de Silvia Jato, la octava guardia, Ana, sujetaba con fuerza la cabeza de Silvia con sus enormes manos, por el pelo con una mano y por debajo de la barbilla con la otra aplicándole largos y intensos lametones con su enorme lengua por toda la cara, cada seis lametones envolvía los labios de Silvia con su enorme boca, le inundaba la boca con su enorme lengua y comenzaba a juguetear con ella recorriendo todo el interior de la boca de Silvia Jato, al cabo de una hora Silvia Jato perdió totalmente la cordura, su risa era silenciosa, su mirada estaba perdida y prácticamente no se movía, únicamente los dedos de sus pies se movían compulsivamente dentro de las bocas de dos guardias que los saboreaban a conciencia, las guardias siguieron trabajando intensamente una hora mas sobre el cuerpo, ya totalmente inmóvil de Silvia Jato.
Mientras, Irina y Susan estaban acabando con Patricia Montero, Irina tenia los dedos del pie izquierdo dentro de la boca, recorriéndolos con su lengua mientras cosquilleaba las plantas de los dos pies al mismo tiempo con sus manos, Susan seguía sentada sobre la cara de Patricia, restregándole su culo sudado una y otra vez mientras la insultaba y le cosquilleaba las axilas con sus dedos, al cabo de media hora, Patricia dejo de moverse, había perdido el conocimiento totalmente agotada y dolorida, Susan reboto su culo sobre la cara de Patricia unas cuantas veces mas pellizcándole los pezones al mismo tiempo y fue a reunirse con Irina, que estaba de pie frente a la pantalla viendo como sus guardias terminaban el trabajo con Silvia Jato, tres guardias trabajaban su pie derecho, deslizando sus lenguas sobre el al mismo tiempo, una lamía los dedos, otra la planta y la tercera el talón, otras tres guardias hacían lo mismo en el pie izquierdo, Marta seguía con la cara hundida en la axila derecha de Silvia Jato, lamiéndola a conciencia, y Ana, estaba sentada sobre su estomago, le había destapado la boca y mantenía su enorme pie izquierdo dentro de ella, agitándolo de lado a lado y moviendo sus dedos dentro de la boca de Silvia Jato mientras la obligaba a mover la cabeza de lado a lado una y otra vez, la mente de Silvia estaba echa puré, las guardias habían acabado totalmente con su resistencia, Ana estaba restregándole los dos pies por la cara al mismo tiempo cuando Irina se dirigió a sus guardias a través de la pantalla, “muy bien chicas, buen trabajo, ahora vamos a dormir todas un poco, Ana, si quieres puedes llevarte a esa perra de Silvia Jato a tu habitación y puedes disfrutar de ella dentro de tu caja, cuando os despertéis ocuparos de Patricia y luego sacar a estas dos perras de la mansión, cuando despertemos, Susan y yo disfrutaremos de la tercera invitada, cuando acabemos ya te llamaremos para que terminéis el trabajo, buenas noches chicas”, Ana se dirigió a Irina en nombre de las ocho guardias, “gracias señorita Irina, realmente es una gran satisfacción para todas nosotras trabajar para usted, buenas noches señorita Dragov, buenas noches señorita Jackson”, Susan contesto a la enorme mujer, “buenas noches Ana, buenas noches chicas”, Ana desato a Silvia Jato y se la puso sobre los hombros sin ningún esfuerzo, a continuación las ocho guardias salieron de la habitación, bajaron por las escaleras y salieron por la puerta principal en dirección a la casa de invitados, que era donde tenían sus habitaciones, Irina acompaño a Susan a la habitación roja que había en esa misma planta para que durmiera y ella fue a la habitación azul, se quito la ropa quedándose en ropa interior, cogió sus prismáticos y los enfoco hacia la casa de invitados, como de era habitual todas las luces estaban apagara excepto la de la habitación de Ana, pero esta vez no estaba sola disfrutando de su botín, Marta estaba con ella, Ana y Marta habían atado Silvia Jato sobre una mesa de madera, estaba totalmente desnuda, tenia los calcetines sudados de Marta dentro de la boca que estaba tapada con un trozo de cinta aislante, dos correas alrededor de sus muñecas y otras dos alrededor de sus tobillos, que mantenían su cuerpo estirado al limite sobre la fría mesa de madera, los dedos gordos de sus pies estaban juntos, sujetos por una pequeña correa de cuero al igual que los pulgares de sus manos, Ana estaba sentada sobre su estomago restregándole sus dos enormes pies por la cara mientras le cosquilleaba los costados, Marta tenia la cara hundida en la axila derecha de Silvia Jato y la mordisqueaba y la recorría con su lengua una y otra vez mientras le retorcía y le cosquilleaba los pezones con dos plumas aplicando una en cada pecho, Silvia Jato estaba totalmente inmóvil, tenia los ojos abiertos como platos, pero estaba desquiciada, le salía abundante saliva por las comisuras de los labios a pesar de tener los calcetines de Marta dentro de la boca y la pelota de goma que aseguraba que Silvia Jato no los pudiera escupir, después de diez minutos observando la escalofriante escena, Irina dejo los prismáticos sobre la mesita que había al lado de la cama y se metió en la cama, se durmió pensando como se lo iban a pasar al día siguiente su amiga Susan y ella con su tercera captura, a Irina era la que mas deseaba cosquillear de las tres, al cabo de diez minutos Irina estaba dormida.
Al día siguiente Irina se despertó y salió de la habitación azul tarareando una canción y pensando en el día que tenia por delante, estaba feliz pensando en como iba a disfrutar con la tercera secuestrada, pico a la puerta de la habitación roja y al no obtener respuesta abrió la puerta, Susan ya no estaba, en esa ocasión había madrugado mas que ella, entonces se dirigió a la habitación lila, abrió la puerta y encontró a Susan y cuatro guardias acabando con Patricia Montero, dos guardias estaban trabajándole las axilas, lamiéndolas a conciencia mientras le cosquilleaban los costados con sus dedos, las otras dos guardias se dedicaban a los pies de Patricia Montero, saboreaban los dedos dentro de sus bocas mientras cosquilleaban las plantas y los talones con los dedos, y Susan estaba repitiendo el tratamiento que le aplico a Patricia el día anterior, estaba sentada sobre su cabeza, restregándole el culo por la cara constantemente mientras le retorcía los pezones y le sobaba los pechos con las manos, Irina se dirigió a su amiga sonriendo, “pero bueno Susan, realmente le tenias ganas a esta zorra verdad?, no te canses demasiado, recuerda que nos espera nuestra ultima presa, esta en la habitación negra, ¿vamos por ella?, deja que las guardias terminen con esa guarra”, Susan le restregó el culo por la cara cuatro veces mas a Patricia Montero, salto de la cama, se puso los pantalones, ya que se los había quitado para sentir al máximo la cara de Patricia debajo de su culo y salió de la habitación tras Irina, dejando a las cuatro guardias terminando el trabajo con la pobre Patricia Montero que ya prácticamente no se movía, las dos amigas se detuvieron delante de la puerta negra, Irina abrió la puerta y invito a Susan a entrar primero, “pasa querida, se que te mueres de ganas de saber quien es la tercera presa”, Susan acelero el paso y al entrar se quedo impresionada al contemplar el cuerpo de la mujer atada y amordazada sobre la cama de terciopelo negro, “oh!!, pero si es Elsa Pataky!! y que cuerpazo tiene, es mucho mejor en directo que por la tele”, Irina se puso al lado derecho de la cama, saco unas tijeras de su bolsillo y corto el sujetador y las bragas que llevaba puestas Elsa Pataky dejándola totalmente desnuda, Elsa Pataky gruño a Irina a través de la pelota de goma que le inundaba la boca, “gggrrrr!!, mmfff!!, gggggrrrr!!, mmfff!!”, la pantalla de la habitación estaba ofreciendo las imágenes de la habitación violeta donde las cuatro implacables guardias estaban terminando con Patricia Montero, el volumen estaba muy bajo, Irina lo había ordenado así, quería que Elsa Pataky pudiese descansar la noche anterior para que la resistencia que les ofreciera a Susan y a ella cuando se pusieran a torturarla fuera la máxima posible, entonces subió el volumen para escuchar los últimos sollozos que salían de la boca de Patricia Montero mientras cuatro lenguas y ocho plumas recorrían su cuerpo una y otra vez, a continuación se dirigió a Elsa Pataky, Susan estaba sentada en la cama al lado derecho de Elsa aspirando el aroma de su cuello recorriéndolo con su nariz a un centímetro de distancia, “mmmm, que bien huele esta perra”, Irina se sentó en la cama al lado de Elsa y le quito la pelota de la boca, Elsa comenzó a suplicar a las dos sádicas amigas con lagrimas en los ojos, Elsa Pataky tenia muchas cosquillas y los rostros de Silvia Jato y Patricia Montero, totalmente desencajados a causa de las cosquillas, recorrían su mente una y otra vez, “por favor, yo no he hecho nada, no me hagáis daño, por favor, os lo suplico, dejadme ir, no diré nada a nadie, por favor, os daré todo lo que tengo, ¿qué queréis?”, Irina y Susan observaban con una enorme sonrisa en el rostro a la pobre Elsa Pataky mientras les suplicaba con lagrimas en los ojos, entonces Susan se dirigió a Elsa, “veras puerca, lo único que queremos de ti es tu cuerpo así que ... prepárate!!”, entonces Susan hundió su cara en la axila derecha de Elsa y comenzó a morderla y lamerla intensamente mientras le cosquilleaba el pecho derecho con una mano y el costado derecho con la otra, casi al mismo tiempo, Irina hundió su cara en la axila izquierda de Elsa y comenzó a cosquillearle el costado izquierdo con las dos manos, Elsa comenzó a retorcerse, “ nooooo!!, ja, ja, ja, aaaaggghhh!!!, ja, ja, nooo!!, piedad!!!, ja, ja, ja, nooo!!!, por favor!!!, ja, ja, ja!”, Irina y Susan se pasaron dos horas trabajando las axilas de Elsa Pataky, cosquilleándolas con sus lenguas a un ritmo muy alto mientras recorrían su cuerpo con sus habilidosos dedos, entonces sonó el teléfono móvil de Irina, estaba sobre una mesita a escasos dos metros de la cama donde estaban trabajando a Elsa Pataky, Irina despego la cara de la axila izquierda de Elsa y fue en busca del teléfono, entonces Susan salto sobre el espectacular cuerpo de Elsa Pataky y se sentó sobre su estomago, a continuación comenzó a cosquillearle las dos axilas al mismo tiempo, aplicando una mano en cada una, mientras le mordisqueaba el cuello, Irina contesto con un tono de voz que desprendía preocupación, “hola Bianca, ¿qué tal estas?, Bianca se había enterado de que Irina había salido de caza, estaba molesta por que esta vez no la había llamado, “hola Irina, me he enterado de que tienes algo entre manos y me preguntaba por que no me has llamado esta vez”, Irina tenia la expresión contrariada, sabia que si Bianca se enteraba estaría molesta y ella le tenia mucho aprecio por lo que reacciono rápidamente, “veras Bianca, para tener a mis guardias contentas, de vez en cuando tengo que encargarles trabajos de este tipo, no quiero que su trabajo se les haga monótono, únicamente pendientes de mi seguridad, tengo que mantenerlas motivadas, pero eso no quiere decir que no te tenga en cuenta, eres la mejor y siempre voy a contar contigo, es mas dentro de un par de semanas Susan y yo tenemos previsto salir de caza así que no te separes de tu teléfono, ¿de acuerdo?”, Bianca reacciono muy bien, “estupendo Irina, solo quería asegurarme de que todo iba bien, nada mas, espero tu llamada cuídate mucho, recuerdos a Susan, hasta pronto”, Irina resoplo después de colgar el teléfono, Susan la observaba mientras cosquilleaba la planta del pie derecho de Elsa Pataky con dos plumas, deslizándolas al mismo tiempo por toda la planta, “¿así que dentro de dos semanas iremos de caza otra vez?, la próxima vez me toca organizarlo a mí y aun no tengo nada pensado, entiendo que no quieras herir a Bianca pero me estas metiendo un poco de presión, ¿no crees?”, Irina se sentó en la cama al lado izquierdo de Elsa y comenzó a cosquillearle el costado con las dos manos, “no te preocupes Susan, el plan de caza dentro de dos semanas lo organizaremos entre las dos, pero entiende que tenia que contentar a Bianca, sabes que siento mucho afecto por esa mujer”, Susan respondió a su amiga sin dejas de cosquillear la planta del pie derecho de Elsa Pataky que se retorcía totalmente histérica, “lo entiendo Irina, a mi también me cae muy bien esa tía, además, sabes que me encanta trabajar contigo, pero ahora démosle su merecido a esta perra!!”, Susan envolvió los cinco dedos del pie derecho de Elsa Pataky con sus labios y comenzó a saborearlos manteniéndolos dentro de su boca mientras cosquilleaba la planta con su mano izquierda y cosquilleaba la planta del pie izquierdo con su mano derecha, Irina salto sobre Elsa sentándose sobre su estomago y comenzó a cosquillearle las dos axilas al mismo tiempo mientras alternaba lametones y mordiscos en su pecho izquierdo, Elsa Pataky comenzaba a estar agotada, “ ja, ja, ja, nooo!!, parad!!, ja, ja, ja, nooo!!!, ja, ja, ja, no puedo maaaaasss!!!, ja, ja, ja!”, Irina y Susan estaban cosquilleando sin descanso a Elsa, pero sus mentes ya estaban trabajando en busca de nuevos objetivos, tenían únicamente dos semanas, Irina y Susan intensificaron notablemente el ritmo, querían terminar lo mas pronto posible con la pobre Elsa para empezar a trabajar en su próxima captura, Susan rodeo la boca de Elsa con sus labios y comenzó a deslizar su lengua dentro mientras le sujetaba con fuerza la cabeza por la mandíbula con la mano izquierda a mismo tiempo que le tapaba la nariz pellizcándosela con dos dedos de su mano derecha, Elsa no podía respirar, cada treinta segundos Susan le soltaba la nariz para que pudiera coger un poco de aire, esperaba cinco segundos y se la volvía a tapar, todo sin dejar de trabajarle el interior de la boca con su viciosa lengua, Irina utilizaba toda la capacidad de su boca para envolver el pie izquierdo de Elsa saboreándolo a conciencia a la vez que deslizaba la lengua entre los dedos, al mismo tiempo cosquilleaba el talón con su mano derecha y deslizaba una pluma entre los dedos del pie derecho, Elsa Pataky estaba totalmente histérica, su cara dibujaba muecas imposibles, sus ojos abiertos como platos estaban a punto de saltarle de las orbitas, su cuerpo, al igual que su rostro, estaba totalmente cubierto de sudor y se retorcía todo lo que le permitían las correas que se mantenían firmes alrededor de sus muñecas y sus tobillos, al cabo de tres horas mas, Elsa Pataky perdió el conocimiento totalmente exhausta, Susan jugueteo un poco mas con su lengua dentro de la boca de Elsa y después se bajo de la cama, Irina aplico tres lametones mas en la planta del pie izquierdo de Elsa, saboreo el dedo gordo dentro de su boca y después de ponerse en pie se dirigió a su amiga, “bien querida ¿qué te parece si nos relajamos en uno de los sofás con un buen vino mientras comenzamos a diseñar la estrategia para la próxima cacería?”, “me parece perfecto Irina, vamos”, Irina y Susan salieron de la habitación, cuando pasaron por delante de la pantalla Irina observo que la habitación Violeta estaba vacía, sus guardias habían acabado con Patricia Montero y seguramente se habrían desecho de ella y de Silvia Jato, cuando bajaron al enorme y lujoso salón de la primera planta, Ana y cuatro guardias mas estaban sentadas en dos sillones charlando animadamente, al darse cuenta de que Irina y Susan estaban bajando las escaleras, las cinco se pusieron en pie y se dirigieron a los pies de la escalera para esperarlas, Irina se dirigió a ellas, “bien chicas ya podéis ir a la habitación negra a terminar con esa zorra, Susan y yo estaremos aquí relajándonos con un buen vino, que os divirtáis”, Ana se dirigió a Irina, “a sus ordenes señorita Dragov, será un placer”, Ana sonrió a Irina y Susan, estas le devolvieron la sonrisa y las cinco guardias comenzaron a subir las escaleras en busca de la pobre Elsa Pataky, Irina lleno dos copas con un excelente vino y las dos amigas se sentaron en uno de los cómodos sofás soltando nombres de hermosas mujeres y discutiendo cual de ellas seria su próxima victima, mientras las cinco guardias estaban trabajando implacablemente sobre Elsa Pataky, dos guardias se encargaban del pie derecho, mientras una saboreaba los dedos dentro de su boca rodeándolos uno a uno con su lengua, la otra saboreaba el talón manteniendo dentro de su boca la mayor cantidad posible recorriéndolo con su lengua, al mismo tiempo recorrían toda la planta aplicando cuatro plumas al mismo tiempo, dos guardias mas se encargaban del pie izquierdo, una mantenía el dedo gordo dentro de la boca y lo saboreaba a conciencia, la otra guardia tenia los otros cuatro dedos dentro de su boca deslizando su lengua entre ellos, al mismo tiempo, las dos guardias aplicaban todos los dedos de sus manos sobre la planta del pie de Elsa cosquilleándolo sin piedad, Ana estaba sentada sobre el estomago de Elsa, le había introducido su enorme pie izquierdo dentro de la boca y jugueteaba con sus enormes dedos intentando agarrar la lengua de Elsa que se movía frenéticamente deslizándose entre ellos ya que era el único espacio que tenia dentro de la boca, totalmente inundada por aquel enorme pie, mientras Ana cosquilleaba las dos axilas de Elsa al mismo tiempo rascando con fuerza con una mano en cada axila, al cabo de tres horas otras tres guardias entraron en la habitación y se unieron a la fiesta, una de ellas era Marta, que como no podía ser de otra forma se lanzo sobre la axila derecha de Elsa, hundiendo su cara en ella para mordisquearla y saborearla intensamente, las otras dos guardias se aplicaron en los costados de Elsa Pataky, deslizando sus leguas y dos plumas al mismo tiempo, cada una trabajaba en un costado, el resto de las guardias mantenían sus anteriores posiciones, dos saboreaban y cosquilleaban el pie derecho, otras dos saboreaban y cosquilleaban el pie izquierdo y Ana seguía jugueteando con sus pies dentro de la boca de Elsa, alternándolos una y otra vez mientras le cosquilleaba la axila izquierda con su mano derecha y le cosquilleaba los pechos con una pluma sujetándola con su mano izquierda, al cabo de dos horas mas Elsa Pataky estaba totalmente aniquilada, su cuerpo estaba prácticamente inmóvil, únicamente movía los dedos de los pies atrapados dentro de las bocas de las diabólicas guardias de Irina, su cuerpo estaba totalmente empapado de sudor y saliva, al igual que su rostro, sus ojos reflejaban todo el sufrimiento que había soportado y las comisuras de sus labios no paraban de derramar saliva bordeando el enorme pie derecho de Ana que seguía moviéndose dentro de su boca, las guardias siguieron martirizando a Elsa Pataky tres horas mas después la desataron, la metieron en un saco, lo sellaron con una cuerda y se la llevaron a cuestas, bajaron a la planta principal, Irina y Susan seguían discutiendo a cerca de quien seria su próxima victima, Ana se dirigió hacia ellas, mientras las otras cuatro guardias salieron por la puerta principal, metieron a Elsa Pataky en la parte de atrás de una furgoneta, dos de ellas se subieron detrás y las otras dos ocuparon el asiento del conductor y del copiloto a continuación arranco el motor y salieron de la mansión.
Ana se situó delante de Irina y Susan que seguían con su elección, “señorita Dragov, si no necesita nada mas creo que me voy a descansar un poco, la pasada noche Marta y yo no pegamos ojo, estuvimos todo el tiempo castigando a Silvia Jato en mi habitación”, Irina miro a Ana con una sonrisa siniestra, “ya veo, si creo que necesitas dormir un poco, no te preocupes hoy no voy a necesitarte mas, que descanses”, Ana se despidió con su amabilidad habitual de Irina y Susan y salió por la puerta principal en dirección a la casa de invitados.
Irina y Susan no se ponían de acuerdo por lo que decidieron poner la tele seleccionando canales al azar buscando una bella mujer que fuese del agrado de las dos, el sexto canal que seleccionaron les mostró a una preciosa mujer, las dos se miraron a los ojos con una enorme sonrisa, la decisión estaba tomada.

FIN .-

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Increiiiibleeee!Hay mujeres muy guapas en España, presentadoras y actrices.
 
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